La Unidad de Mama del Hospital Mateu Orfila ha incorporado el equipo necesario para poder realizar biopsias del ganglio centinela en mujeres con cáncer de mama en estados iniciales mediante una nueva técnica, no radiactiva, que utiliza un trazador magnético y una sonda. Se trata de un importante avance en el pronóstico y tratamiento de esta enfermedad, que evitará el traslado de pacientes al Hospital Son Espases, además de reducir notablemente los tiempos de espera y, por tanto la ansiedad y el sufrimiento de las pacientes, según han explicado hoy el gerente del Área de Salud de Menorca, Antoni Gómez, el jefe del servicio de Ginecología del Hospital, el Dr. Juan Carlos Hermoso, y el jefe del servicio de Cirugía General y Aparato Digestivo, el Dr. Fernando Alcaide.
El Dr. Juan Carlos Hermoso, el gerente Antoni Gómez Arbona, y el Dr. Fernando Alcaide.
Esta técnica se utilizó por primera vez en el hospital el pasado 27 de enero y, hasta la fecha, se ha practicado en tres pacientes. Para mañana miércoles hay programadas otras dos biopsias, y se calcula que en torno a 45 de los 60 casos de cáncer de mama que se detectan cada año en la isla podrán beneficiarse de esta tipo de intervención y, por tanto, evitarán desplazarse a Palma para la detección y biopsia del ganglio centinela.
La mayoría de los tratamientos del cáncer de mama en fase temprana implican la realización de la biopsia selectiva de ganglio centinela (BSGC). Este método, que sirve para identificar aquellos ganglios linfáticos con mayor probabilidad de albergar metástasis, permite al facultativo determinar el estadio en que se encuentra el tumor y la toma de decisiones para el tratamiento post-quirúrgico.
El sistema clásico para localizar los ganglios centinela utiliza un radiotrazador que precisa de medicina nuclear. El sistema alternativo denominado Sentimag -de eficacia similar y avalado con estudios multicéntricos–, utiliza partículas paramagnéticas inofensivas para el organismo y un magnetómetro para localizar las posibles metástasis que se hubieran extendido hacia la axila.
El importante avance que representa esta técnica va asociada a la incorporación de un equipo denominado Osna, en el laboratorio de Anatomía Patológica. Este equipo permite la lectura automatizada del ganglio o ganglios centinela en apenas 30 minutos para poder determinar si está afectado o no por células tumorales y si es preciso proceder a un linfadenectomía axilar.
La combinación de ambas mejoras permite que, a día de hoy, se pueda practicar una biopsia del ganglio centinela, extirpar el tumor de la mama y, si es preciso, operar la axila en una misma sesión quirúrgica de un máximo de tres horas. Este mismo proceso requería, hasta hace apenas un mes, de distintos procesos quirúrgicos que se podían prolongar durante un mes, incluido un ingreso hospitalario de dos o tres días en Son Espases.