\ En 2020 ha disminuido un 6,87 % el número de partos en Can Misses y ha aumentado un 5,36 % en Formentera
\ En los meses de pandemia de COVID-19 se han atendido 987 partos y ha habido 96 gestantes positivas
Uno de los más importantes indicadores que marcan la calidad asistencial en la actividad obstétrica es la tasa de cesáreas. Esta práctica es sin duda necesaria en determinados momentos en los que surgen complicaciones en el parto, pero su adecuación a las indicaciones sanitarias internacionales es uno de los principales objetivos del Servicio de Obstetricia del Área de Salud de Ibiza y Formentera, y más en un momento de pandemia como el actual, en el que numerosos estudios apuntaban a un posible incremento de las cesáreas.
En este escenario, es muy destacable el descenso del 15 % de cesáreas respecto al año pasado en el Hospital Can Misses, donde la tasa se ha situado en su mínimo histórico, con un 12,17 %, frente al 14,33 % que se registró el año 2019.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda tasas de cesáreas por debajo del 15 %, algo que cumple el Servicio de Ginecología y Obstetricia en los últimos años. Esta tasa histórica de cesáreas ha permitido situar al Hospital Can Misses como el centro con la tasa de cesáreas más baja de toda la comunidad autónoma de las Islas Baleares.
2020 ha sido un año marcado por la pandemia y el área obstétrica y el paritorio no han sido ajenos a ello. Durante el inicio de la pandemia se modificaron los circuitos de asistencia en la sala de partos con la elaboración de los protocolos correspondientes. Inicialmente se estableció el cribado clínico sistemático asistencial al ingreso en la unidad basado en síntomas (tos seca, fiebre, disnea, anosmia, ageusia y contacto con persona infectada) con las actuaciones correspondientes en caso de positividad. Posteriormente, en el mes de abril de 2020, se protocolizó un cribado a las treinta y nueve semanas de gestación acompañado de recomendación de medidas de aislamiento hasta el parto y continuación del cribado clínico estricto. Finalmente se adoptó en junio de 2020 el cribado universal de las pacientes obstétricas a su ingreso en el Hospital por medio de PCR rápida.
Respecto al control del embarazo, también se modificaron los circuitos de asistencia con la adopción de las medidas de seguridad pertinentes, aunque se respetaron las visitas obstétricas presenciales hospitalarias para todas las gestantes que coincidían con las ecografías de cribado obstétrico trimestrales.
Además, durante la pandemia, desde el Servicio de Obstetricia y Ginecología, se puso en marcha un protocolo de seguimiento de gestantes positivas en COVID-19, a partir de la notificación por parte de Atención Primaria.
Desde el inicio de la pandemia hasta final de enero de 2021, el área obstétrica, que dirige el Dr. Rodolfo Moreno y que coordina la Dra. Raquel Gascón, ha atendido 987 partos y ha habido 96 gestantes positivas en SARS CoV-2, aunque no todas han dado a luz en este momento.
La mayoría de los casos positivos (70 %) se diagnosticaron en el primer y segundo trimestre del embarazo, y el 30 % en el tercer trimestre o al ingresar para el parto. El curso de la infección en la gran mayoría de las gestantes ha sido leve-moderado, con únicamente tres ingresos: dos de ellos en planta y uno en la UCI, lo que concuerda con los datos publicados al respecto.
Según la Dra. Raquel Gascón, <<la infección por COVID-19 resulta asintomática o leve-moderada en la casi totalidad de las gestantes en primer y segundo trimestre, con un aumento de las hospitalizaciones en el tercer trimestre por mayor gravedad de la enfermedad, especialmente en gestantes con factores de riesgo>>.
El jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia, Rodolfo Moreno, destaca que <<uno de los aspectos más preocupantes al inicio de la pandemia fue el impacto que tendría sobre las prácticas obstétricas y la dinámica del funcionamiento de nuestra sala de partos. Sabemos que la tasa de cesárea es un marcador de calidad asistencial, de manera que una buena tasa refleja una buena práctica de todos los cuidados obstétricos proporcionados por un servicio de obstetricia. La pandemia ha supuesto un profundo cambio en la vida de las personas y por ende de las gestantes, con —sobre todo al inicio— altas cargas de incertidumbre y preocupación, también de los profesionales, sobre la propia salud y la del feto. Ello necesariamente podía repercutir en una variación de los estilos de práctica obstétricas. Hoy, ya podemos confirmar que la variación de los circuitos de asistencia no ha repercutido en nuestra práctica obstétrica. La mayoría de las embarazadas infectadas por SARS-CoV-2 han pasado la enfermedad de manera leve o asintomática. A pesar de las alarmantes cifras de aumento de tasas de cesáreas publicadas al inicio de la pandemia, parece ahora claro que las gestantes con infección por SARS-Cov-2 no han de presentar una tasa superior a la del resto de la población general>>.
La actividad de las salas de partos del Área de Salud de Ibiza y Formentera en 2020 ha disminuido un 6,3 % respecto al año anterior. El año pasado, los alumbramientos en los dos hospitales pitiusos alcanzaron la cifra global de 1.144, mientras que en 2019 fueron 1.221.
En el Hospital Can Misses bajan los partos un 6,87 %
En Can Misses ha disminuido un 6,87 % el número de partos atendidos en 2020, 1.085, respecto al año 2019, que se registraron 1.165 alumbramientos. Esta tendencia descendente se mantiene en los dos últimos años, ya que en el año 2018 fueron 1.202 los partos atendidos.
La tasa de partos prematuros ha descendido un 26 % en 2020, y ha supuesto el 3,42 % del total de partos, mientras que el año anterior fue del 4,63 %.
También ha descendido ligeramente, un 1,53 %, el porcentaje de casos en que se ha aplicado la anestesia obstétrica epidural: ha pasado de suponer el 60 % en el año 2019 al 59 % en 2020. Las matronas atribuyen el descenso progresivo del número de anestesias epidurales de los últimos años, que se situaba en el 66 % en 2017, a la oferta de alternativas analgésicas en Can Misses, como la bañera de partos y del óxido nitroso. «Nuestro objetivo es que todas las gestantes tengan a su alcance el mayor número de recursos para el alivio del dolor y que sea cual sea su elección estén satisfechas con la experiencia», según Nieve Clara Mateazzi, matrona y supervisora de Paritorio.
El índice de partos múltiples ha bajado un 57,87 % puesto que en 2019 suponían el 1,97 % del total de partos y en 2020 esa cifra ha bajado hasta el 0,83 % de la cifra global de alumbramientos atendidos en el hospital público ibicenco.
Aumentan los partos un 5,36 % en el Hospital de Formentera
En el Hospital de Formentera ha aumentado un 5,36 % el número de partos: en 2020 se atendieron 59 y en 2019, 56 partos, una tendencia creciente en los últimos años, ya que en el año 2018 fueron 48 los partos atendidos.
El porcentaje de cesáreas se ha situado en el 18,64 %, un 4,37 % más que en el año 2019, que supuso el 17,86 % del total de partos. La tasa de cesáreas del Hospital de Formentera oscila entre el 17 y el 19 % en los últimos años, muy lejos del 32 % que se registró en 2010, gracias al trabajo constante de adecuación de la tasa de cesáreas.
El Hospital de Formentera atiende todos los partos salvo los que presentan alguna posible complicación. Ello explica que no se hayan producido partos múltiples ni prematuros en los últimos años, ya que estos casos son trasladados al Hospital Can Misses, que cuenta con la Unidad de Cuidados Intermedios de Neonatos, además de la Unidad de Cuidados Intensivos.