\ La Gerencia ha dedicado casi un millón de euros a reforzar la plantilla de personal durante la pandemia
\ El equipamiento tecnológico para Microbiología, la compra de equipos de protección y la medicación específica superan los 600.000 €
Miles de equipos de protección individual (EPI), decenas de mamparas protectoras de metacrilato instaladas en todos los mostradores de los hospitales y de los centros de atención primaria de Ibiza y Formentera, miles de litros de solución hidroalcohólica, cientos de miles de pares de guantes, un extractor automatizado, un termociclador y una microcentrífuga de sobremesa refrigerada para las pruebas PCR son solo algunas de las compras que ha realizado el Área de Salud durante la pandemia para hacer frente a la COVID-19 y garantizar la seguridad de los profesionales sanitarios.
A falta de repercutir aún a la Gerencia algunas de las compras centralizadas y realizadas por los Servicios Centrales del Servicio de Salud de las Islas Baleares, la inversión hasta el momento en diferentes capítulos supera el millón y medio de euros, exactamente 1.663.197,69 €.
El apartado de personal es el que encabeza la inversión, con 956.816,69 € destinados a contratar más de medio centenar de profesionales, con los que ha sido posible reforzar diferentes puntos de atención de la COVID-19, como las UVAC, el Laboratorio de Microbiología o la Unidad de Estancia Media Ca Na Majora. Entre esos profesionales se cuentan 7 médicos de atención primaria, 17 enfermeros, 25 técnicos en cuidados auxiliares de enfermería, 5 facultativos especialistas y 3 técnicos de laboratorio.
Por otro lado, la adquisición de material fungible —equipos de protección individual, gafas, mascarillas de protección FFP2 y FFP3, buzos y batas, entre otros— ha supuesto un gasto de cerca de medio millón de euros. Esos 458.000 € han servido para proveer más de seiscientos mil guantes de nitrilo, miles de litros de solución hidroalcohólica, cientos de miles de mascarillas quirúrgicas, más de cuatro mil trajes de protección biológica, miles de batas de aislamiento y algo más de treinta mil peúcos.
Por último, las inversiones en la compra de equipamiento tecnológico para el Laboratorio de Microbiología, que ha permitido hacer los test urgentes para detectar la COVID-19, el mobiliario y el material para las unidades COVID —cabinas y mamparas protectoras, tensiómetros, videolaringoscopios y pulsiómetros— la monitorización de un box de la UCI, o la instalación de 25 tomas de oxígeno en el gimnasio de Rehabilitación han alcanzado los 248.381 €. Entre estas compras se cuentan dos aparatos para el diagnóstico molecular rápido, uno con un panel respiratorio multidiana (modelo QUIAstat), que permite determinar otros virus respiratorios y cuya respuesta se obtiene en 70 minutos, y otro (modelo GeneXpert) que permite obtener resultados en 50 minutos.
Según la directora gerente del Área de Salud de Ibiza y Formentera, Carmen Santos, «para defendernos de esta pandemia hemos hecho un gran esfuerzo económico para responder con medios al enorme esfuerzo de los profesionales del Área de Salud, desde el primero hasta el primero, porque en compromiso y responsabilidad aquí no ha habido últimos».